Osnat Barzani, la primera mujer de la historia que dirigió una yeshivá

Historia de la primera mujer en la historia que presidió una yeshivá:  una kurda a caballo entre los s. XVI y XVII que además de  lideresa política también fue una gran literata.

El Rey Salomón, en 932 aec. ,  murió sin designar heredero, lo cual dio pie a una lucha dinástica por el trono que acabó dividiendo el reino en dos : al norte, el reino de Israel, con capital en Shjem; al sur, el reino de Judea, con capital en Jerusalén. Mientras tanto, al este, en Mesopotamia, el reino de Asiria, y al sur de este, Babilonia. En 722 aec los asirios conquistan el reino de Israel y se llevan a los hebreos a Nínive. Según la tradición, los descendientes del cautiverio de Nínive son los judíos kurdos. (Otros dicen que son los descendientes de la tribu de Benjamín).
Los kurdos hoy en día luchan por su territorio, comprendido entre Turquía, Irak, Irán, Siria y un poco de Armenia. Durante la Edad Media vivieron bastante prósperamente, como lo atestigua el gran viajero español Benjamín de Tudela en su libro de viajes, cuando visitó el lugar en el S XII.  Luego, cuando llegaron los otomanos, su estado se fragmentó en dos, uno otomano y otro persa.

En esa época,  nació Osnat, hija del rabino Shemuel Barzani, familia rica e influyente que dio al judaísmo gran número de rabinos, jueces, gramáticos, entre los que se pueden nombrar, por ejemplo, en el S IX, a Saadia Ha´Gaón, de Bagdad, o a Dunash Ben Labrat, importante gramático  hebreo en Al Andalus, en el S X dec. El patriarca de los Barzani , Natanaek Ha´Leví, vivía en el pueblo de Barzán, y era el jefe de la comunidad judía al norte de Irak. De allí, la familia pasó a Mosul, Irak, donde su hijo Shmuel fundó una gran yeshivá a la que acudían a estudiar judíos de todo Oriente Medio. Cuando Shmuel murió, como no tenía hijos varones, heredó la presidencia de la academia talmúdica, su yerno, Yaakov Misraji, y cuando murió éste, se produce un hecho inaudito en la historia del judaísmo: es nombrada presidenta la viuda de Misraji, la hija de Shmuel, Osnat bat Shmuel.
Osnat , en una carta escrita por ella misma, dice que ella fue criada como una princesa de Israel (la familia era, no obstante bastante pobre) rodeada de eruditos talmúdicos y sin tener más ocupación que la de estudiar todo lo que los judíos deben estudiar.

Se casó con el más aventajado estudiante de su padre, Yaakov Misraji, quien prometió a su suegro que su hija, aun casada, seguiría estudiando. De hecho, para que el marido pudiera estudiar, era ella la que se ocupaba de la dirección escolar y de instruir a los discípulos. Tal era su pasión por la docencia que tras haber parido un hijo y una hija rogó a los cielos se le cerraran las entrañas para no tener que dejar de estudiar nunca más. Y de impedir el cierre de la yeshivá, pues pasaban por necesidades económicas, como se desprende de las muchas cartas que ella envió a todo el mundo para recaudar fondos. en sus cartas se revela su inteligencia y un impecable uso de la lengua hebrea.

Además, tenía inclinaciones literarias y componía piutím -poemas litúrgicos de la tradición hebrea. Algunos de los piutím que se le atribuyen no son de ella, sino de un trovador judío de la Provenza que imitaba su estilo, prueba no sólo de su valía lírica sino también de hasta donde llegaba su fama.

A ella, a pesar de que ya vivía muchos siglos después de la era rabínica de los tanaítas -los compiladores de la ley oral en el Talmud- la llamaban La Tanaít. De las cartas se desprende que todo el mundo la tenía por muy respetable y honorable, a pesar de que no era rabino, claro está, sino sólo marbitzát Torá.

Se cuentan sobre ella muchas leyendas , pero la más conocida es la de la multitud de ángeles. Parece ser que su padre se le aparecía en sueños para prevenir daños en la familia. Un día fue a la localidad de Amadya, en el kurdistán irakí, para convencer a los judíos de celebrar Rosh Jodesh al aire libre, como se había hecho siempre, y no dentro de las casas, por seguridad. Mientras rezaban, se vieron llamas ascender a los cielos y era la sinagoga, que había sido incendiada. Pero dicen que ella susurró el nombre inefable que su padre le había revelado en sueños y un contingente de ángeles descendió sobre la sinagoga para apagar el incendio. Cuando se acercaron a ver el desastre, comprobaron que ni el Sefer Torá ni ninguno de los pergaminos sagrados había sido quemado. La sinagoga pasó entonces a llevar su nombre.

La Tanaít se reunió con sus padres en el año 1670, y el lugar en donde fue enterrada aún es lugar de peregrinación para los judíos kurdos, vivan su diáspora donde la vivan.

Uno de los más conocidos descendientes de los Barzani fue Moshé Barzani, que emigrado a Jerusalén con sus padres a principios del S XX, se enroló en las milicias (ilegales) de Leji, siendo uno de los dos tristes protagonistas de los del Patíbulo ,  La impresionante historia de Barzani y Feinstein. Además de los descendientes que lideran la lucha por los derechos del pueblo turco en la actualidad.

Articulo escrito por Por Pedro Huergo Caso  14/06/2020

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